La NASA ha comunicado que llevará un segundo aterrizador lunar en sus misiones posteriores a la Artemis III. Al contrato no podrá presentarse SpaceX.
Ya es un hecho, la NASA ha comunicado que asumirá los costes de desarrollo de un segundo módulo de aterrizaje encargados de llevar al hombre a la Luna.
Un nuevo concurso sin SpaceX
Con el fin de poner en marcha el nuevo proyecto, la agencia espacial abrirá un concurso público denominado Sustaining Lunar Development, que se encargará de las misiones de larga duración que sigan a la Artemis III. Esto significa que el proyecto no se hará realidad antes de 2026 o 2027.
SpaceX no podrá participar en el nuevo concurso. Ya ganó en solitario el Human Landing System, que le permite trabajar en el aterrizador de la misión Artemis III. Pero la NASA tiene la intención de negociar con SpaceX un contrato paralelo a Sustaining Lunar Development, con el propósito de sufragar cambios no concretados en el módulo de aterrizaje de la compañía, también para una segunda misión de demostración tripulada.
Una disputa entre compañías
Se dio el caso de que, cuando la NASA eligió la Starship de SpaceX como aterrizador del programa Artemis, sus otros rivales, Blue Origin y Dynetics, hicieron todo lo posible por impugnar el contrato. Sobre todo el primero, que es la empresa aeroespacial de Jeff Bezos, que llevó al Gobierno de Estados Unidos ante la Corte Federal de Reclamaciones.
El alto tribunal falló a favor de la NASA porque el proyecto Starship costaba $2900 millones frente a los $6000 millones del aterrizador de Blue Origin.
Los pormenores del nuevo contrato
Pero la NASA ha dado otra oportunidad a Blue Origin, aunque no podrá concurrir al concurso con el mismo concepto de aterrizador. El contrato necesita módulos de aterrizaje con mayor capacidad y rendimiento. Se trata de que puedan transportar más astronautas y carga a la superficie lunar, además de estar preparados para permanecer durante más tiempo en nuestro satélite natural.
Se publicará un borrador con propuestas a finales de marzo, y una versión concreta y actualizada en primavera. Si los planes se cumplen, el contrato podrá ser adjudicado a principios de 2023. Todavía se desconoce el presupuesto destinado a Sustaining Lunar Development, pero los presupuestos norteamericanos para el año fiscal 2023 se conocerán muy pronto, y seguramente darán detalles de este proyecto.
El proyecto Artemis III, que es el primer vuelo tripulado a la Luna desde las misiones Apolo, está planificado para 2025. Los astronautas utilizarán un cohete SLS a bordo de una nave Orion. Después, la Starship lunar será lanzada en paralelo junto a un número no inferior a cuatro Starships que irán abasteciéndola.
La Starship tendrá que acoplarse con la Orion ya en la órbita lunar, y será el destino de los astronautas antes de alunizar. Será necesario que utilicen un elevador para bajar desde la cabina de la Starship hasta el suelo, pues el módulo alunizará en posición vertical.
En una fase final, la Starship despegará de la Luna para devolver a los astronautas a la Orion, en la que regresarán a la Tierra. La Starship será desechada.