Los grandes secretos que esconde la chlorella son múltiples, pero todos muy relacionados con la enorme cantidad de beneficios que aporta a nuestro organismo. Esto es así, tanto en el plano nutricional como por sus propiedades depurativas.
Unos pocos datos
La chlorella es un género demicroalgas unicelulares verdes y están entre los habitantes más antiguos del planeta. Constituye la mayor fuente alimentaria conocida con mayor concentración de clorofila, la sustancia verde que protagoniza la fotosíntesis en las plantas y que en el cuerpo humano produce efectos antioxidantes y depurativos.
La clorofila forma moléculas complejas con compuestos químicos tóxicos o cancerígenos e interfiere en su absorción intestinal, así como en su capacidad para causar daños en el organismo. Es por ello que es usada en algunas terapias de tratamientos de desintoxicación.
El alga chlorella es algo más que un alimento. Se compone de más de un 60% de proteínas biodisponibles con nueve aminoácidos esenciales necesarios para construir las proteínas y el ADN, que son los que reparan los tejidos dañados y ayudan al sistema inmunitario para protegernos de bacterias y virus invasores. El factor de crecimiento o Chlorella CGF es una combinación de estos aminoácidos y promueve el crecimiento de las células del cuerpo y estimula la reparación celular.
Aunque no existe un consenso científico respecto al efecto inmunitario, algunos autores defienden que ciertos polisacáridos y péptidos de la chlorella poseen la capacidad de estimular el sistema inmunitario, dotándolo de propiedades analgésicas y antiinflamatorias.

Propiedades
La chlorella es rica en betacaroteno, por lo que 5 g satisfacen la mitad de las necesidades diarias de provitamina A, esencial para el buen estado de la piel, los ojos y las mucosas. El betacaroteno es además un potente antioxidante.
La dosis que hemos señalado también cubre respectivamente el 35 y el 24% de las necesidades diarias de hierro y zinc. También contiene magnesio y fósforo en proporciones menores.
La chlorella es rica en valores nutrientes: su extracto seco es proteína en un 58%, grasa poliinsaturada en un 9%, hidratos de carbono en un 23% y fibra en un 1%. Sin embargo, sus cualidades nutrientes y energéticas no son lo más destacable, ya que se consume en pequeñas cantidades.
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Virginia Commonwealth (Estados Unidos) ha confirmado que la chlorella posee B12 activa. En concreto, 9 g de Chlorella pyrenoidosa contienen 21 mcg de vitamina B12 asimilable. El estudio se ha realizado con 17 personas, cinco de las cuales no asimilaron la vitamina B12, por tanto sus resultados no pueden tomarse con carácter general.
Contraindicaciones
No existen contraindicaciones graves ni ningún tipo de toxicidad conocida relacionada con el consumo de chlorella en las dosis recomendadas. Sí que es cierto que puede existir fotosensibilidad en personas que tomen elevadas dosis. En algún caso puede producir un aumento del ácido úrico, náuseas y malestar estomacal.
Los efectos secundarios se dan en muy raras ocasiones y sólo durante la primera semana consumo. Los más comunes incluyen diarrea, náuseas, gases (flatulencia), cambio de color verde de las heces, y calambres en el estómago. En caso de tener estos síntomas interrumpir inmediatamente la ingesta.
No es aconsejable su consumo durante el embarazo y la lactancia.
Ideal contra la acumulación de metales pesados
En nuestro día a día, ingerimos muchos productos químicos y metales pesados que se van acumulando en nuestro organismo con la polución, con el consumo alimentos contaminados con pesticidas, cuando cocinamos pescados cargados de mercurio y de otros metales pesados y un largo etc.
Una de las mejores fuentes de desintoxicación natural para remover y eliminar estos materiales tóxicos fuera de nuestro cuerpo es la chlorella. Su estructura molecular permite que se una a metales pesados como el mercurio, productos químicos y algunos pesticidas, y expulsarlos fuera del cuerpo.

Elemento esencial en la cocina
Como aporte nutricional podemos añadir una cucharadita de 2 a 3 g de chlorella en polvo a nuestros batidos, zumos, aliños para ensaladas, etc. En un plan estrictamente terapéutico, tomaremos una cucharadita de postre (5 g), en un vaso de agua, tres veces al día (en ayunas y después de las comidas). Si la tomamos antes de las comidas conseguiremos un efecto saciante. En todo caso, con la chlorella conseguiremos enriquecer nuestras recetas con un sabor, color y nutrientes muy saludables.